By Déborah Berman Santana
(Spanish article below)
April 19, 2009, marks ten years since a U.S. Marines pilot missed his target while bombing Vieques, killing civilian guard David Sanes Rodríguez. David was not the first Viequense to die at the hands of the military; however, his death was the “drop that overflowed the cup” of more than sixty years of military occupation of three fourths of Vieques’ land, causing economic stagnation and ecological devastation. David’s death united Puerto Ricans in a show of resistance whose messages reverberated worldwide: Not one more bomb! Navy out! Peace for Vieques! Four intense years of militant, nonviolence civil disobedience, including thousands of arrests, forced the Navy to close its base on May 1, 2003.
Nonetheless, the base closure signaled merely the end of one phase of the Vieques struggle, where “true peace” has been locally defined as “the Four D’s”: Demilitarization, Decontamination, Devolution (return of lands), and (sustainable) Development by and for Viequenses. Six years after the base closed –– ten years since David’s death—where is Vieques?
Demilitarization: While bombings and other military maneuvers were halted, the military still operates powerful ROTHR radar and radio towers on Mount Pirata, officially for the “war on drugs”; however, evidence points to use for electronic warfare, including weather modification.
Decontamination: The Navy is responsible for environmental cleanup. Since the land is designated as a “wildlife refuge” required cleanup levels are insufficient, particularly for a population suffering from the health effects of contamination from all kinds of military weapons. Activists are currently fighting the Navy’s plan to simply burn the vegetation in the bombing range, using a variety of strategies – including risking arrest by entering the bombing range and once again serving as human shields to defend Vieques.
Devolution: The ex-base lands are still under U.S. Government control, which not only restricts Viequenses’ use of their island, but also carries the risk of re-militarization. Activists recently met to plan a strategy that would eventually return the lands to the people of Vieques.
Development: Worldwide attention to Vieques also attracted land speculators and other well-heeled outsiders who have caused property values to skyrocket, thus endangering the Viequenses’ ability to afford to stay on their own island. Creation of a Vieques Community Land Trust – one of the few mechanisms in a capitalist market – would help put brakes on land prices and also provide an entity that could receive and administer the returned lands. If Viequenses can manage to recover their beloved island, care for and develop it, and stabilize their community, David Sanes’ death will have not been in vain.
abril del 2009
Vieques, la lucha continúa:
Reflexiones a los diez años de la muerte de David Sanes
Por Déborah Berman Santana
El 19 de abril del 2009, se cumplirán diez años del incidente en que un piloto de la marina norteamericana se desvió de su objetivo durante un bombardeo en Vieques, y ocasionó la muerte del guardia civil David Sanes Rodríguez. David no fue el primer civil en morir a manos del ejército norteamericano; pero su muerte fue la “última gota en colmar la copa” de mas de 60 años de ocupación militar de mas de tres cuartas partes del territorio viequense; ocupación que solo ha traído el estancamiento económico y la devastación ecológica. La muerte de David unió a los puertorriqueños en una manifestación de resistencia, y el mensaje de esta se hizo sentir en todo el mundo. ¡Ni una bomba mas! ¡Fuera la marina! ¡Paz para Vieques! Luego de cuatro años intensos de desobediencia civil militante y pacífica, en los cuales se dieron miles de arrestos, la marina fue obligada a cerrar su base militar el 1 de mayo del 2003.
No obstante, el cierre de la base solo significó el fin de una etapa de la lucha de Vieques, en donde la “paz verdadera” que buscan los viequenses ha sido definida como las cuatro D’s”. Estas son: la desmilitarización, descontaminación, y la devolución, (el regreso de las tierras, así como su desarrollo sostenible bajo la dirección y para el beneficio de los viequenses.) A seis años del cierre de la base y diez años de la muerte de David Sanes, ¿cual es la situación de Vieques?
Desmilitarización: Aunque los bombardeos y otros ejercicios militares han sido frenados, el ejército aún mantiene poderosos radares ROTHR y torres radiales en el Monte Pirata. Estos según la versión oficial del ejército forman parte de la “guerra contra las drogas”; sin embargo, la evidencia sugiere que el equipo está siendo utilizado en ejercicios de la guerra electrónica, los cuales incluyen modificaciones climatológicas.
Descontaminación: La marina es responsable de la limpieza del ambiente de Vieques. Como el territorio fue designado como refugio para la vida silvestre,” los niveles de limpieza que estos lugares exigen son insuficientes, especialmente para una población cuya salud sufre los efectos de la contaminación mediante el uso de toda clase de armamentos militares. En estos momentos los activistas están tratando de impedir que la marina queme la vegetación en los campos de prácticas de bombardeo. Para ello se están valiendo de una diversidad de estrategias – que incluyen enfrentar los arrestos y entrar a esos campos para convertirse una vez mas en escudos humanos para proteger a Vieques.
Devolución: Las tierras que antes componían la base militar aún están bajo el control del gobierno estadounidense – cosa que no solo limita el uso de las mismas por los viequenses, sino que las pone en riesgo de ser militarizadas nuevamente. Recientemente los activistas se reunieron para desarrollar una estrategia que logre la devolución de esas tierras a manos de los viequenses de una vez y por todas.
Desarrollo: La atención mundial lograda por Vieques también atrajo la atención de especuladores y otros extranjeros, lo cual ha ocasionado un alza dramática en el valor de la propiedad. Esto también pone en peligro la habilidad de los viequenses de permanecer en su propia isla. La creación de un fideicomiso comunal es uno de los pocos mecanismos dentro del mercado capitalista que podría en alguna medida frenar el alza del precio de las tierras. También crearía una entidad que podría recibir y administrar las tierras una vez sean regresadas. Si los viequenses pueden recobrar su amada isla, cuidarla, desarrollarla, y darle estabilidad a sus comunidades, la muerte de David Sanes no habrá sido en vano.