Eduardo Villanueva Muñoz
Carlos Alberto Torres lleva 28 años preso y Oscar López Rivera lleva 27 años preso. Avelino González Claudio fue arrestado y espera juicio próximamente. Todos han ido a la cárcel por su creencia en la independencia de Puerto Rico y por su lucha para que los puertorriqueños ejerzan verdaderamente el derecho a la autodeterminación.
El Comité Pro Derechos Humanos lleva varios años de lucha en busca de la excarcelación de todo prisionero político. Para agradecer al pueblo por el apoyo a esta lucha, para reconocer el inmenso sacrificio de nuestros presos y para demostrar que hay gente dispuesta a hacer grandes esfuerzos en pro de un ideal, nuestro Comité organizó un ayuno de tres días, pernoctando en el lugar (jueves 9 de octubre de 2008 a las 7:00 p.m. al domingo 12), en la Plaza Colón del Viejo San Juan.
Fue una experiencia aleccionadora y educativa que en época electoral demuestra que la solicitud de excarcelación de nuestros presos políticos es un asunto de derechos humanos que genera consenso en el pueblo puertorriqueño. A la conferencia de prensa convocando a la actividad compareció un abanico de personalidades y organizaciones a saber: Jacobo Morales, Antonio Martorell, Rafy Trelles, Elizán Escobar, el Lcdo. Julio Fontanet, el Lcdo. Arturo Hernández, actual presidente del Colegio de Abogados, la ex senadora Velda González, el Dr. Héctor Pesquera, el Lcdo. Samuel González y varios otros compañeros y compañeras que colaboran con la campaña hace varios años.
Al ayuno-vigilia asistieron familiares de los presos, tanto de Oscar como de Carlos Alberto y personalidades de sectores estadoilibristas, estadistas e independentistas. Allí, casi a la luz de la luna llena, tuvimos una primera noche de poesía, cerca de ocho poetas y poetisas declamaron sus poemas, haciendo alusión a la libertad, a la creación, al amor, al dolor de la soledad, a la naturaleza, al amor intimo y casi todo lo que sirve de sustrato a la creación del poeta.
El segundo día de ayuno dialogamos con visitantes, les explicamos el concepto de preso político a varias personas. Ilustramos sobre porqué el delito de conspiración sediciosa es uno político, asociado a las creencias del convicto, además porque sentencias de 78 y 85 años (Oscar y Carlos Alberto) son penas desproporcionadas a ese delito. Bill Clinton (ahora ex presidente de EU) calificó las sentencias de desproporcionadas y las vinculó a sus ideales políticos cuando liberó once en 1999. Si diecinueve años son desproporcionados al cargo imputado, 27 y 28 lo son mucho más y constituyen una pena cruel e inusitada, lo cual es contrario al derecho constitucional norteamericano.
Ese segundo día (sábado) se presentó el trabajo de seis artesanos, algunos de los cuales realizaban tallas de santos en el lugar. En la tarde nos visitaron cineastas y artistas gráficos y entre lluvia, viento, sol y sombra, casi en una esquizofrenia ambiental, dialogamos sobre el arte, el cine, la creación de documentos históricos, el centenario del natalicio de Juan A. Corretjer, el amor patrio, la solidaridad humana y la pedagogía de la liberación que significa un arte puesto al servicio de la patria.
El sábado en la noche, luego de un día intenso, casi sin dormir por un viernes en el cual los jóvenes que regresan de su fiesta, hablaban y se amaban con estruendo cerca de los pernoctantes sin preocuparse por el sueño o el descanso que pudieran interrumpir, tuvimos la noche de teatro. Carlos Vega escribió y escenificó con dos magníficos actores más (Carlos Miranda y José Luis Gutiérrez) “Naufragio por la libertad”, obra de corte existencialista en la cual vemos náufragos reflexionan en medio del mar, si eran libres en la isla o si lo eran más en su balsa, en el mar proceloso, sin saber dónde iban a parar, habiendo luchado para sobrevivir en espera de que los rescataran – pensando en la muerte posible – cómo habían vivido durante su existencia. La obra nos transmite que vivir no es un hecho orgánico físico– es un ejercicio de libertad existencial, de ser autentico, de ser libre aun en la colonia.
El segundo día dormimos un poco mejor. Algo de lluvia, algo de viento y nos despertó una curiosa serenata, por ser ofrecida en un campamento a favor de que se excarcelen presos políticos. Mientras jóvenes de la FUPI, generosamente velaban nuestro sueño y las escazas pertenencias – un amigo alborozado, a las 2:30 de la madrugada, nos cantaba el “Star spangled banner” en español. Seguro que muchos anexionistas no se lo saben y mucho menos alguien se los lleva de serenata a las 2:30 a. m.
El domingo sería un día largo. Comenzaron algunos yendo a misa – yo leía, hablaba con amigos que llegaron a las 6:30 a. m. a vernos y esperábamos la visita de los Reyes Magos Cantores. Tan pronto llegaron, diversas personas se acercaron a verlos y oírlos cantar, algunos con sus hijos y nietos que fueron al frente para verlos de cerca. Una niña como de cuatro años le dijo a la madre: “Mamí, esos Reyes son de verdad, porque no tienen barba postiza”. No cabe duda que los niños muchas veces con su alma, ven más lejos que los adultos. ¡Que bien se oye un cuatro acompañando los Reyes! Un joven (Luis Lulio), repicaba con sabrosura un bongó y Tito Tió, que lo mandó “el diablo” a tentarnos con un bollo de pan caliente, tocaba con ritmo acompasado y jibaro una güira que le prestaron – los ayunantes le perdonamos su tentación por el “ Tour de force” que hizo con la güira. Uno de los Reyes cantó una canción que poéticamente deconstruye nuestra bandera – la estrella es la de oriente y los tres colores que la componen, cada uno representa a los tres Santos Reyes. La música interpretada por los tres Santos Reyes, es música de liberación y de creación.
Luego en la tarde, otra vez lluvia y viento, mientras la gente seguía llegando – a ver, a cooperar con firmas, a preguntar sobre la campaña, desde Venezuela, Japón, Estados Unidos, España, lo cual ayuda a comunicar nuestro reclamo de justicia y derechos humanos internacionalmente. De hecho, Olga Sanabria de COPRONU, nos ayudaba ayunando en New York y repartía nuestro comunicado de prensa informando el ayuno-vigilia por la excarcelación de los presos a algunos delegados de la Cuarta Comisión de la ONU. El cantante nacional, Danny Rivera, con un joven virtuoso del cuatro y la guitarra, haciendo voces solidarias, Luis Romero y Bruny García, calentó la tarde del domingo. A Danny le dije que le llovía una lluvia de admiradores, pero con todo y lluvia él cantó como un jilguero y nadie se fue, al contrario, la Plaza se iba llenando. Danny puso la música y la belleza al cantar “Verde Luz” y “Un Sueño Imposible”, que es el himno del que lucha por un ideal, decidido a vencer con el más puro afán. Ali Tapia cantó, tocó guitarra y evocó a Corretjer, incluyendo su concepción política sobre las elecciones, teniendo espacio libre cada uno de los asistentes, para expresar su parecer sobre votar o no votar. El interprete conocido como “79”, cantó Hip Hop con la ayuda de Dominga, con criticas a la guerra, al racismo, a Mc Cain, al proceso electoral y la invitación constante a no quedarse callao, ni el que vota, ni el que no bota, con lo cual demostramos que la libertad de expresión y de disensión son esenciales en un proceso de liberación.
Cada día, gracias al Dr. Héctor Pesquera, tuvimos médicos que fueron a examinar y monitorear la condición física de los ayunantes. Agradecemos profundamente la solidaridad de los amigos médicos que sacaron de su tiempo, incluso uno de ellos a quien le bajaba una piedra del riñón y asistió sábado en la noche a examinarnos, lo cual es un acto de profundo valor y generosidad para con la causa de nuestros presos.
Cerramos con un acto ecuménico, dando gracias a Dios, incluso por la lluvia y el viento, que insuflaba la energía de la naturaleza al fin del ayuno. Se leyó la carta del Premio Nobel, Desmond Tutu, al Presidente Bush, solicitando la excarcelación de nuestros presos, como un acto de conciliación. Se leyó la carta de Oscar López reflexionando sobre el ayuno como ejercicio de introspección y meditación. También, como arma de solidaridad con el reclamo de justicia de otros presos.
Muchos actos de ternura, de entrega a la lucha, de solidaridad, quedan fuera de esta corta memoria, más por falta de espacio que de memoria, pero mi agradecimiento y del Comité Pro Derechos Humanos quedan para siempre. Sé que nuestros prisioneros se sienten acompañados y respaldados por su pueblo y por el valor eterno del ideal de la libertad.